El tatuador cofrade. Será el artista encargado de realizar la XXXII edición del cartel Frente a la Tribuna

Victoriano de nacimiento y convicción. Fue entre calles y colegios de este popular barrio malagueño donde, desde muy pequeño, comenzó a desarrollar este atributo innato. Entre juegos y aprendizajes, siempre rodeado de lápices y pinceles, fue demostrando que lo suyo era más que una cualidad. Autodidacta en sus diferentes técnicas y estilo, tanto en la pintura como en la escultura. Aunque ha pasado por la Escuela de Artes y Oficios de San Telmo, del cual conserva un especial cariño hacia uno de sus profesores: Julio Tovar. Estudioso de todas las bellas artes, pero muy especialmente el barroco, considerando a Caravaggio “El padre de todo”. Los museos, iglesias o monumentos son espacios que visita con gran fervor, a través de la contemplación analiza y valora el trabajo de cualquier manifestación artística; una relación casi mística que le ayuda a desarrollar su maestría. Un admirador de nuestra Semana Santa ya que la considerándola “un museo en la calle”, debido a su devoción por la escultura y más concretamente la religiosa.

 

Experimentar su arte sobre diferentes soportes, le lleva a “probar” con la piel humana. Aunque en una primera incursión no tiene resultado satisfactorio, sigue trabajando y estudiando esa técnica, tanto es así que se la plantea como reto. Su afán y dedicación hacen que vaya dominando este complicado medio de expresión artístico, así es como considera al tatuaje y su razón de trabajar en este oficio.

Desde hace varios años, Dani se estableció con su taller de Tatoo en la calle principal de su barrio -Victoria 45-, gozando de un gran prestigio en el mundo del tatuaje. Su lista de espera puede llegar a más de seis meses. Aunque no se considera un tatuador al uso, paradójicamente su cuerpo está “limpio”, no está tatuado. Entró en este gremio por que le atraía desarrollar su pintura sobre un lienzo vivo, que es como considera la piel humana. La excelencia de sus trabajos y la gran devoción hacia la imaginería cofrade hizo que se convirtiera en el gran especialista del tatoo cofrade, de ahí su sobrenombre de “El tatuador cofrade”. Daniel Fernández está dedicado plenamente a ese su oficio, por lo que otras técnicas de pintura o escultura la ejerce muy esporádicamente, nada profesional, como es la ocasión que nos ocupa: el cartel de la trigésima segunda edición de Frente a la Tribuna, su primera obra para la Semana Santa de Málaga.

 

Texto: Paco Villasana                                                                                                   Fotos: Dani Fernández, Paco Villasana